De todas las frases de despedida que pensé, esta fue la que me pareció menos cursi y al mismo tiempo realista, Nicolas Sparkley la escribió en “Mensaje en una botella” (eso de ponerle en una caja, fue para acercarme más al concepto ZOÍ PICA BOX, nostalgias que le dan a uno) .
Hace días que Zoí dejó su local de Punta Carretas, pronto vendrán otros, hice intentos de mudarlo, pero la cosa se complicó y debo cerrar. (Igual sostengo la marca, las fórmulas y las ganas, así que cuando la noria del parque dé otro giro, capaz que reaparece Zoí en algún lugar.
Lo importante ahora es que este es un GRACIAS, a ustedes, a la vida y a todo lo que se les ocurra que puedo agradecer por la experiencia ZOÍ en todas sus etapas, sí, aun las que no parecieron tan buenas, todo se agradece.
¿Por qué cerró Zoí? Siguiendo con la analogía literaria, cerró por “Una serie de eventos desafortunados”, aunque con menos drama que en las historias de Daniel Handler, eso fue lo que definió este cierre desde el que les hablo hoy.
Tras bastidores siempre hubo un “Top 10” de clientes (muy peleado) de comercios, empresas colaboradores y proveedores, no puedo nombrarlos a todos, algunos nombres se escapan a la memoria o tal vez ni siquiera los sé, pero ninguno de ustedes fue menos importante que otro. De antemano, perdón por las omisiones.
Gracias a los adorables clientes de viandas, a las que esperaban ansiosas el miércoles de tarta de jamón y queso con ananá, o el lunes de atún, a les que se quejaban sanamente y nos ayudaban a mejorar (también damos gracias a les que se quejaron solo por hábito, pero igual nos obligaban a revisarnos y mejorar, ja,ja ) .
Gracias a los más fieles, como las genias de Sempai , les profes del Cole vecino, el psicólogo que nos hacía terapia gratis, el invaluable budista y ese pequeño grupo que estuvieron hasta el final con sus pedidos de Croquicas, hummus o tarta de zanahoria, puerro y queso crema. (No digo los nombres por privacidad, pero seguro que ya se identificaron y sienten mi agradecimiento).
Gracias a Juana y los Heladeros del Tango, Pao Larrama, Teapot Plays, el colectivo Sulov y tooodo ese grupo de gente que integró a Zoí en su arte, mis reverencias de pie para ellos.
Gracias a los proveedores que han confiado y en ese grupo, Muy especialmente a Fede de ProGestión, Ale de Pulso y Gonzalo de Il Duomo , los incondicionales que siguen confiando.
Gracias por el excelente apoyo logístico de Buen Provecho y de TuFiesta, también a Guillermo de Todoweb, y a los Súper fotógrafos, Javier Chacón, Ale Alonzo y Elisa Basanta. Gracias a todos los comercios que confiaron en los congelados Zoí , sublime agradecimiento para los dos primeros y constantes Alaska y Veganoide.
Internamente el muy especial Gracias a Daniela , que se puso el local al hombro y además tomó las riendas gastronómicas sin las cuales esto no hubiera existido, recuerdo con agradecimiento su primer grupo de batalla: Ary, Luisito y Lucia y al último Súper Team Culinario Pamela y Riqui.
Un Gracias importante al Gerente de producción y logística Sr. Pilu Ramírez, cuando llegó al proyecto algunos de los infortunados eventos ya habían sucedido, pero ha sido pieza clave para cumplir objetivos , llegar conmigo al final y dar pie a un nuevo comienzo.
En este final de decisiones difíciles, tendría que hacer especial énfasis en detallar a la familia que me banca a los amigos que están y a ti que me lees, pero si lo hiciera esto no sería un post, sino una novela y ustedes no lo estarían leyendo ahora, así que va abrazo grupal.
Detrás del pseudónimo, su servidora reiterando sin parar el agradecimiento por leerme y por haberme permitido vivir esta experiencia y apoyarme en este difícil cierre, y ojalá que en mi próximo emprendimiento pueda contar con gente la mitad de buena que ustedes, eso sería suficiente.
Y para el final una de Mario Benedetti: “En la vida hay que evitar tres figuras geométricas: los círculos viciosos, los triángulos amorosos y las mentes cuadradas” ¿Qué tiene que ver eso con el cierre de Zoí ? En realidad, nada, pero me pareció bueno cerrar con otra analogía literaria, en este caso de un ilustre uruguayo.
Namasté.
Patricia Alvarez
Comments